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Acelga


  
     Es una planta rústica que se adapta muy bien al cultivo en contenedor, posee un sistema radicular importante por lo que necesita un buen volumen de sustrato, entre  25 y 30 litros, aunque por propia experiencia puedo asegurar que se adapta a contenedores de menor volumen obteniendo hojas de menor tamaño y por lo tanto menor producción. El sustrato debe de estar bien abonado ya que es una planta exigente en nutrientes.

     Sus grandes hojas hacen que se pierda mucha agua por evaporación por lo que debemos mantener el sustrato constantemente húmedo evitando que se encharque. Un buen método para mantener la húmedad y evitar que el sustrato se seque es recubriendo la superficie de este con paja (a esto se le denomina acolchado), así quedará protegido del sol y mantendrá la humedad con el consiguiente ahorro de agua, yo a falta de paja utilizo mucho la corteza de pino que venden en bolsas de varios litros en grandes superficies o viveros. En lo referente a las horas que necesita de sol podemos decir que es una planta que se adapta bien a recibir pocas horas de sol directo como a estar a pleno sol, las he cultivado en una terreza que apenas recibía dos horas de sol en otoño y también las he cultivado en verano en una terraza a pleno sol casi todo el día, con muy buenos resultados en ambos casos.

     Se trata de una planta ideal para iniciarse en el macetohuerto por su facilidad de cultivo incluso cuando somos principiantes.

     Para hacernos con las plantitas para su cultivo podemos obtenerlas mediante semillas, ya que su obtención por este método no presenta dificultad. Las semillas las podemos obtener en muchos sitios porque está muy difundida pero sería preferible adquirir semillas ecológicas, hoy en día es fácil conseguirlas por internet. También se pueden obtener comprando en algún vivero las plántulas pero de esta manera no sabemos de donde procede ni los tratamientos que se le han dado. Para su propagación por semillas sembraremos 1 ó 2 en sustrato a una profundidad de 1 a 2 cm en el semillero (que bien puede ser un envase de yogur, con su correspondiente agujerito abajo para que se vaya el agua sobrante), mantendremos húmedo el sustrato y aproximadamente al cabo de una semana comenzarán a germinar las semillas, cuando las plantitas tengan una altura igual al del semillero en el que lo hemos plantado las podemos transplantar a su sitio definitivo.

      Eligiendo las variedades adecuadas podemos tener acelgas todo el año, es una planta que se adapta bien al frío llevando peor las altas temperaturas aunque existen variedades que son más resistentes al calor que otras.

    Siendo una de las plantas que más he cultivado he tenido pocos problemas en lo referente a enfermedades o plagas, creo recordar que algunos "minadores de la hoja" hacían sus galerías en alguna hoja suelta, cortándola desaparecía el problema; este verano tengo algún visitante que no consigo localizar al que también le gustan mis acelgas (tiene buen gusto), podéis ver las fotos más abajo.


   Hace unos años lo que más daño causó a mis acelgas fue una tormenta de granizo que las destrozó por completo, pero aún así cortándoles las hojas estropeadas y dejando las más pequeñas del centro volvieron a retoñar.

    
   La recolección la haremos cortando las hojas grandes y exteriores y dejando las del centro para que la planta siga produciendo. Con 3 ó 4 plantas tendremos suficiente para hacer una buena recolección semanal durante muchos meses. Deberemos de hacer un abonado semanal a partir del mes y medio de su transplante al recipiente para ir aprovisionando a la planta de los nutrientes que irá perdiendo en parte por culpa de los riegos o lluvias. Este abonado podemos hacerlo con algún abono líquido o echando un poco de humus de lombriz en la superficie del sustrato, siempre utilizaremos abonos ecológicos.



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